NEW HAMPSHIRE._ El dominicano Marbin Cruz González, quien residía en Lawrence, fue condenado a 17 años en una cárcel federal después de declararse culpable de dirigir una organización regional de tráfico de drogas en el tribunal de Concord (New Hampshire).
Un comunicado de la fiscal federal Jane Young dice que Cruz González, de 37 años, ciudadano de la República Dominicana, fue sentenciado a 204 meses de prisión y 5 años de libertad supervisada.
Cruz González se declaró culpable de conspiración para distribuir fentanilo y cocaína y ha estado encarcelado desde que fue arrestado en febrero de 2022, dijo Young.
“Durante un tiempo, Marbin Cruz González fue el principal distribuidor de
narcóticos en esta región. Si bien evitaba en gran medida el contacto directo con las drogas, dirigía el negocio del narcotráfico tras bastidores. La larga sentencia de hoy demuestra que los narcotraficantes de alto nivel no pueden ocultar sus identidades para eludir la responsabilidad ordenando a sus subordinados que trafiquen drogas en las calles de nuestras comunidades”, añadió la fiscal.
“La Administración de Control de Drogas (DEA) está comprometida a investigar a individuos como Cruz González, quienes son responsables de distribuir drogas letales como el fentanilo a los ciudadanos de New Hampshire”, dijo el agente especial interino a cargo de la DEA, Stephen Belleau, de la División de Campo de Nueva Inglaterra.
“La sentencia responsabiliza al señor Cruz González por sus crímenes, pero sirve como advertencia a los traficantes que están alimentando la epidemia de opioides con drogas mortales para lucrarse y destruir la vida de las personas. La principal prioridad de la DEA seguirá siendo combatir la epidemia de opioides trabajando con nuestros socios locales, del condado, estatales y federales para llevar ante la justicia a cualquiera que distribuya este veneno”, añadió Belleau.
Cruz González era el líder de una organización de tráfico de drogas con sede en Lawrence que distribuía drogas a través de una red de sub distribuidores en toda la región del norte de Nueva Inglaterra, incluido New Hampshire, dijeron las autoridades.
Su organización utilizaba al menos 20 números de teléfonos diferentes para concertar transacciones con sub distribuidores y utilizaba 13 empleados diferentes para operar su empresa ilegal, explica la fiscalía.
“Él es el último acusado en ser sentenciado en esta investigación que duró varios años, este proceso es parte de una investigación del Grupo de Trabajo de Control de Drogas contra el Crimen Organizado”, sostiene el comunicado.