
«Queremos enterrar a nuestros muertos»: angustia en el INACIF por la lenta entrega de las víctimas del Jet Set.
AGENDA56, SANTO DOMINGO. – El dolor y la desesperación se han apoderado de aquellas personas que se encuentran desde tempranas horas de la mañana de este jueves, y algunas, según explican, desde incluso hace dos días, por el proceso para la entrega de los cuerpos sin vida de sus seres queridos que fueron víctimas del derrumbe del techo del Jet Set y que han sido trasladados al Instituto Nacional de Patología Forense Doctor Sergio Sarita Valdez.
Decenas de personas, con el rostro abatido y la esperanza hecha pedazos, claman porque los cuerpos de sus parientes sean entregados lo ante posible, para poder darles cristiana sepultura antes de su descomposición.
«Queremos enterrar a nuestros muertos», dijo una señora desconsolada, clamando por la entrega de su pariente. «¿Qué vamos a enterrar?… ¿huesos?», exclamó otra fémina identificada como Luisa Arianna Ruiz.
Arianna Ruiz, quien según expresó lleva tres días sin dormir, desde que se enteró de la tragedia en la que también estaba envuelta su sobina Melisa Tejeda, una joven médica de apenas 26 años.
Entre lágrimas, Ruiz clamó por una acción más efectiva de las autoridades: “No es justo que todos los que estamos aquí vinimos a buscar los cuerpos de nuestros seres queridos y todavía no los tengamos. Si hay que llamar a quien sea de Estados Unidos, háganlo. ¡Hay más de 200 cuerpos ahí y no los entregan! Se están descomponiendo, aquí hay un olor horrible”.
A su lado, otra pariente de Melisa elevó un llamado al presidente y a las instituciones competentes: “Sabemos que la ley exige autopsias, pero esta situación se sale de lo normal. Si se va a hacer una a cada cadáver, no vamos a poder sepultar a nuestros muertos. El dolor ustedes lo están viendo… estamos aquí desde ayer (miércoles), hicieron el levantamiento a las seis de la tarde, y esta es la hora que todavía no nos han entregado el cuerpo de Melisa”.
“Alrededor de prácticamente dos días tenemos aquí…”
Por otro lado, está el testimonio de Isabel Martínez, quien según explica, llegó al Inacif para identificar a su sobrina, Geidi Alexandra Aquino, víctima del colapso. Cansada, con el rostro cubierto por la tristeza, narró con voz apagada el proceso que ha vivido desde entonces:
“Uno viene, le dan un ticket, luego espera que lo llamen por el mismo. Cuando lo llaman, lo ponen en una lista, lo envían a ver unas fotos para identificar a su familiar… te dan un número o código, y en eso estamos esperando”, explicó.
